Cada vez son más las organizaciones, fundaciones, empresas y particulares que dedican parte de su tiempo a ir en apoyo de los emprendedores que están buscando sacar adelante un proyecto, pero que por diversas razones, como por ejemplo la falta de conocimiento o capital, se les hace más difícil lograrlo. No por nada la figura del mentor hoy en día ha tomado mucha fuerza y es algo que es altamente reconocido por las propias personas que han decidido emprender.
En una encuesta realizada por la organización Foro Innovación, a 275 protagonistas del ecosistema emprendedor, un 57% de los participantes confirmó estar muy de acuerdo con que el hecho de contar con un mentor permite mejorar sustantivamente tu negocio.
Y es así como el Capital es solo una de las 4C del emprendimiento, son muchos los emprendedores que están buscando adicionalmente el Consejo, el Cariño y también los Contactos, ya que estos son una primera necesidad a la hora de emprender. ¿Por qué?
Porque un negocio exitoso no sólo requiere de, valga la redundancia, la idea de negocio; ser emprendedor es una dimensión en 360°, que también implica exponerse a las vivencias de otros que ya tienen camino recorrido, recibir contención suficiente ante obstáculos y éxitos (un criterio fundamental de lo que llamamos “un ecosistema”) y, por último, cultivar las redes, ya que sin networking una empresa, cualquiera sea su tamaño, no es nada.
Con facilidad un emprendedor se puede sentir agobiado o agotado emocionalmente, y es responsabilidad de todo el ecosistema apoyarlo con cariño y no dejar que ese emprendedor (y ese emprendimiento) caiga. Similar a cómo sucede con el consejo: alguien que está partiendo encuentra fortaleza en la experiencia de un tercero que ya vivió logros y fracasos similares. Por lo mismo es que no es baladí la figura del mentor.
En relación a los contactos, éstos son cruciales a la hora de emprender ya que, por un lado son útiles para formar alianzas, generar instancias de colaboración, compartir experiencias, y por el otro tenemos que, parte de ampliar nuestras redes significa ampliar nuestra base de clientes, y mientras más clientes tengamos, más exitoso será nuestro negocio.
La única manera de potenciar el ecosistema y dar paso al surgimiento de nuevos emprendedores, ideas e innovaciones, es haciéndolo juntos, ayudándonos unos a otros. ¡El ecosistema es colaborativo! Las 4C no sólo son fundamentales, sino que son un factor basal para seguir cultivando el emprendimiento de nuestro país en un entorno rico y próspero.
Por Edgar Spielmann, director de G100.