En conversación con integrantes del G100, el Almirante Julio Leiva, Comandante en Jefe de la Armada de Chile, analizó el Plan Nacional Continuo de Construcción Naval, que contempla la construcción de buques de combate en Chile en lugar de adquirirlos usados en el extranjero.
El martes 1 de junio se realizó el encuentro virtual entre la Corporación de Apoyo al Emprendimiento G100 y el Almirante Julio Leiva, Comandante en Jefe de la Armada de Chile. El espacio de conversación fue moderado por Edgar Spielmann, integrante de G100 y socio fundador de 2Be Named, y contó con la presencia de los asociados de la Corporación y los emprendedores de los campeonatos Nada Nos Detiene.
Durante el encuentro se analizó el Plan Nacional Continuo de Construcción Naval. Además, los asociados del G100 pudieron levantar sus inquietudes en torno a dicho plan y cómo éste se incorpora al ecosistema del emprendimiento en el país.
El Almirante Julio Leiva señaló que “Chile necesita buques, tiene una extensión de mar tremenda, recursos, comercio y necesita tener presencia en los mares, porque la protección de los mares no se hace por decreto ni por buenas intenciones, sino que se hace con buques que efectivamente estén en los lugares que se les requiere«.
Explicó que en el último tiempo los buques logísticos han sido construidos en Chile -a través de la empresa estatal Asmar-, mientras que los buques de combate han sido adquiridos en el extranjero, principalmente, a países como Estados Unidos, Holanda y Reino Unido. Al respecto, la institución encomendó un estudio a la Universidad Católica de Chile (PUC) que determinó que comprar buques de guerra de segunda mano es más costoso que construirlos en el país desde sus inicios. «El buque completo, con buena tecnología y buen desarrollo industrial, se puede hacer prácticamente en Chile», señaló.
Consultado por la ruta que debe seguir un emprendedor que quiere ofrecer sus servicios, Leiva respondió que “aquí la idea es que se entre a través de quien es el que tiene la tarea de construir el buque», y que, en ese sentido, la puerta de entrada es la empresa estatal Asmar, que es quien requiere de los distintos proveedores para poder efectuar el proceso de construcción completa de un buque, siempre al menor precio y con la máxima eficiencia.
Para concretar este plan, señaló el Almirante Leiva, es necesario «que el Estado crea en nosotros, que el presupuesto me lo asegure con flujos estables por 12 años y yo le construyo tres buques en ese tiempo, pero que no me entregue los presupuestos cada 4 años y que luego diga vamos a ver si la economía está buena para que entregue los otros (dineros). Eso no funciona, en países que tienen visión de futuro, no es así«.
Al finalizar, el Almirante Leiva comentó que «si Chile no ve bien las potencialidades y lo que tiene que desarrollar en el ámbito marítimo, si no tiene esa claridad, el país es inviable, porque corre riesgo su comercio marítimo, corre riesgo la operación de sus puertos, corre riesgo el agotamiento de los recursos y corre riesgo por el tema contaminación«.